EL TERCER OJO
Caminaba absorto en mis pensamientos por una calle cuando oí la voz de un hombre a mis espaldas llamando mi atención. Me detuve y me volví. Para mi sorpresa era mi amigo Apollo, a quien no veía desde su…
Caminaba absorto en mis pensamientos por una calle cuando oí la voz de un hombre a mis espaldas llamando mi atención. Me detuve y me volví. Para mi sorpresa era mi amigo Apollo, a quien no veía desde su…